lunes, 9 de junio de 2008

La espera que pasó.


Si, te espero
aquí te espero
sentada de la mano de mis sombras
en este ricon de mis sueños
en el sueño más soñado...
y cuanto más oscura
se torna esta espera,
más aguardo aquí sentada
en nuestro ocaso.
Rogando al gran señor
que ésta noche tu vuelvas
esperando un amanecer
que aún no llega.
Los minutos se consumen
como agua en tierra seca
acompañado de mis llantos,
mis llantos que inundan
este sitio de sombras
mientras aguardo
y tu no llegas.

Me decidí por dejar de soñar,
mis sombras se alejaron
y éste ricon cada vez
resulta más inapropiado
hasta los ecos de mi voz
núnca más se han escuchado.
Ya ni siento el frio,
nunca veo las horas en que sale el sol
ni tampóco en las que llega el ocaso
todo me resulta tan raro...
el tiempo me parece eterno
y yo sigo esperando...
A veces siento que la gente no me vé
que nadie me escucha, ni escucha mis llantos
veo crecer las flores de nuestro jardin
y aqui te sigo esperando...
Cuánto tiempo ha de haber pasado?
mi reloj se detuvo en algún momento
y no llevo la cuenta de cuantos dias
o años te he esperado.
Veo que los vecinos de enfrente se han mudado,
¿en qué momento?
no lo sé.
Pero el que tenía cinco,
hoy camina con un bastón en su mano.
Todo parece tan lejano...
desde que te fuíste y me quedé esperando
han cambiado muchas cosas
sin embargo te sigo esperando.
Hoy de casualidad escuché el llanto
de un par de ancianos
lloraban por mi, sino me he equivocado
hasta me trajeron flores.
Pero aún no se por qué...
no sé que ha pasado,
yo solo te seguiré esperando.

Y hoy no puedo creer
como todo ha cambiado
todo menos la forma en que te quiero
que es la que hasta el cielo
me ha llevado.

No hay comentarios: